A menudo nos gusta explicar el funcionamiento de determinados componentes informáticos con el objetivo de que todos nuestros lectores tengan nociones básicas acerca de la gestión de una herramienta que forma parte de nuestro día a día. Por ello, en esta ocasión y tras conocer algunos aspectos clave relacionados con el funcionamiento de nuestro equipo, nos vamos a poner manos a la obra para explicar qué es el overclocking.
Antes de comenzar
Pero antes de comenzar queremos aconsejaros que echéis un vistazo a los artículos relacionados con hardware que escribimos anteriormente, ya que nos puede ser de ayuda a la hora de profundizar más en el funcionamiento de nuestro equipo.
Estos son los que no os debéis perder:
- Qué es la placa base de un ordenador
- Qué es la fuente de alimentación de un ordenador
Una vez conocidos estos componentes básicos de nuestro equipo, ya es hora de que pasemos a conocer otros conceptos avanzados como es el caso del overclocking.
Qué es el overclocking, para qué sirve y qué peligros presenta
A continuación vamos a definir este proceso además de encontrar sus utilidades más interesantes y, por supuesto, conocer los peligros del overclocking, algo esencial antes de proceder.
Qué es el overclocking u OC
El overclocking es un concepto que muy posiblemente habremos escuchado en alguna ocasión, y se trata ni más ni menos del proceso a través del cual conseguimos exprimir al máximo la velocidad de reloj de determinados componentes de nuestro PC como puede ser la CPU, la GPU o incluso la tarjeta gráfica.
Este sistema se utiliza para lograr rendimientos muy superiores a los de serie con los que vienen los dispositivos cuando los compramos, o incluso para poder exprimir algo más un ordenador que ya tiene varios años a sus espaldas.
Para qué sirve el overclocking
Con el paso del tiempo nuestros componentes se van quedando pequeños para los nuevos requisitos tanto de programas como de juegos. Por ello, es posible que utilicemos un ordenador que no rinda como debiera, lo que hace que pensemos en adquirir uno nuevo para poder movernos con fluidez.
Sin embargo, con el overclockin tendremos la posibilidad de aumentar algo más la vida útil de los componentes antes de descartarlos, ya que lo que hacemos es forzarlos para conseguir un rendimiento mayor.
No obstante, este proceso evidentemente tiene sus puntos negativos que vamos a conocer a continuación.
Los peligros del overclocking
Uno de los principales peligros que podemos considerar es el hecho de que este proceso hará que el componente overlockeado funcione a más rendimiento, lo que evidentemente se traduce en un mayor sobrecalentamiento.
Por ello y si no queremos quemarlo, tendremos que refrigerar al máximo, lo que posiblemente suponga la necesidad de sustituir el ventilador o incluso optar por refrigeración líquida.
Por otra parte, si el componente está en garantía, al realizar overclocking debemos tener claro que la perderemos automáticamente.
Lo mejor que podemos hacer si somos novatos es probar con un PC viejo que no necesitemos, aumentando la velocidad poco a poco de forma gradual y comprobando que el sistema sigue estable, ya que una subida muy repentina puede derivar en inestabilidad y problemas con el equipo.