En esta ocasión vamos a aprender cómo administrar los iconos del escritorio, un proceso que a priori puede resultar bastante sencillo pero que muchas veces pasa desapercibido y al final no llegamos a disfrutar de una interfaz totalmente adaptada a nuestras necesidades.
Los iconos principales en Windows 8
Independientemente de los programas que tengamos instalados, Windows 8 nos ofrece la posibilidad de incluir una serie de iconos de escritorio referidos a funciones destacadas del propio sistema operativo. Estos iconos son Equipo, Archivos del usuario, Red, Papelera de reciclaje y Panel de control.
Si vamos a utilizar cualquiera de estos con cierta asiduidad, puede ser interesante colocarlos directamente en nuestro escritorio. A su vez, si ya están en el escritorio y queremos quitarlos de en medio porque no les damos uso, siguiendo el mismo proceso que vamos a detallar a continuación lo podremos hacer sin ningún tipo de problema.
Primero que vamos a hacer es pulsar con el botón derecho sobre cualquier espacio libre de nuestro escritorio, y a continuación elegimos la última opción denominada “Personalizar”. Esto hará que entremos a una nueva ventana similar a esta:
En nuestro caso tenemos que dirigirnos al enlace “Cambiar iconos del escritorio” que podremos ver en la parte izquierda, y con ello se abrirá esta nueva ventana.
En la parte superior veremos la posibilidad de seleccionar o deseleccionar cualquiera de los iconos que comentábamos antes. Evidentemente, si los mantenemos seleccionados, aparecerán automáticamente en el escritorio, y en el caso de que desactivamos la casilla desaparecerán sin que tengamos que realizar ningún otro proceso.
Un poco más abajo también podremos comprobar que tenemos la posibilidad de modificar el tipo de icono que utilizamos, a la vez que también podemos elegir si queremos que a la hora de cambiar el tema de Windows 8, los iconos se adapten al mismo o permanezcan siempre con las características que hayamos elegido.
Consejos para administrar los iconos del escritorio
A su vez también existen algunos otros trucos que nos pueden ser de utilidad para administrar los iconos del escritorio.
Para ello, lo que haremos será pulsar con el botón derecho sobre el icono que queremos configurar, y al final de la lista seleccionamos “Propiedades”. En la nueva ventana veremos en principio tres pestañas:
Pestaña General
Aquí veremos información básica relacionada con el icono que queremos modificar. Podremos elegir aspectos importantes como la aplicación con la que queremos que se abra cuando lo ejecutemos, el espacio que ocupa, el lugar en el que se encuentra ubicado, fechas de creación, modificación y acceso, la posibilidad de modificar atributos de sólo lectura y oculto o incluso optar por atributos avanzados como la compresión o cifrado de contenido, etcétera.
Pestaña Seguridad
Aquí tendremos información relacionada con la seguridad y los permisos del archivo, permitiendo o denegando el acceso de forma remota o incluso la gestión personalizada.
Pestaña Detalles
Y como título informativo, en esta pestaña encontraremos una gran cantidad de propiedades y valores que nos pueden ser de mucha utilidad. A su vez, en la parte inferior encontremos un enlace que nos permitirá quitar las propiedades y la información personal del archivo.