Cada vez es más necesario un ordenador en casa y en nuestro puesto de trabajo, pero por muy potente que sea el que hayamos adquirido, con el paso del tiempo observaremos que va perdiendo algunas de sus prestaciones. Evidentemente esto no quiere decir que el ordenador se esté estropeando, pero sí que hay que realizar algunas tareas que nos permitan recuperar su funcionamiento como el primer día. Hoy voy a explicar cómo hacer que mi ordenador vaya más rápido, y para ello tendremos en cuenta algunos de los detalles que generalmente serán los que irán haciendo que su funcionamiento se ralentice.
No instales más programas de los que necesitas
Este es uno de los consejos más importantes, razón por la cual os lo ponemos al principio del listado de acciones que nos van a permitir conseguir que nuestro ordenador vaya más rápido.
Hay que tener en cuenta que muchos programas se ejecutan en el momento en el que iniciamos nuestro sistema operativo, lo que significa que están consumiendo recursos al encontrarse en segundo plano. Por esa razón, instalar programas que no vamos a utilizar nunca, en realidad tan sólo estaremos consumiendo recursos innecesarios a la vez que esto se podría traducir también en un aumento de la temperatura del PC e incluso en un mayor consumo eléctrico, siempre y cuando estemos hablando de que tenemos varios programas innecesarios instalados en nuestro equipo.
Por ello debemos analizar muy bien lo que instalamos y evitar estar metiendo pequeños programas a los que generalmente no les vamos a dar uso alguno, y en el caso de que haya alguno de estos, lo mejor que podemos hacer es eliminarlo y olvidarnos de él.
Elige el sistema operativo adecuado
Existe la falsa creencia de que un sistema operativo anterior va a funcionar más rápidamente en un PC actual, es decir, que un ordenador que compremos a día de hoy, con un Windows XP iría volando completamente. Esto no es tan cierto como pueda parecer, ya que los nuevos sistemas operativos no sólo están capacitados para gestionar mejor los recursos de nuestro equipo, sino que también permiten aprovechar dichos recursos con otros límites superiores, a la vez que están mejor gestionados de forma que logramos un funcionamiento más fluido y más rápido.
En ese sentido, por norma general no debemos tener miedo a utilizar el sistema operativo más actualizado del momento, ya que si bien es cierto que en algunos ordenadores muy viejos no va a funcionar muy adecuadamente, en otros que puedan tener 5 o 6 años, lo más probable es que disfrutemos de un mejor rendimiento.
Por ello recomendamos probar para sacar la conclusión de si realmente es preferible estar con un sistema operativo anterior o mejor optamos por cualquiera de los últimos sistemas operativos más actualizados que podemos encontrar en el mercado a día de hoy.
Instala un buen antivirus
Por otra parte, de forma diaria navegamos y a menudo nos movemos por páginas de dudosa seguridad o incluso descargamos material sin pensarlo dos veces, lo cual muchas veces puede venir acompañado de algún “amigo” no muy grato.
No debemos olvidar que los virus no siempre se manifiestan, sino que a menudo se pueden instalar en nuestro equipo y nosotros ignorar por completo su presencia, obteniendo así información de nuestro equipo, haciendo uso de nuestros recursos y en general amenazando nuestra seguridad a la vez que entorpecen el normal funcionamiento del PC.
Por esa razón, lo ideal es tener un buen antivirus instalado y bien actualizado para protegernos frente a la mayor parte de estas amenazas. No olvidemos que no es sólo evitar que entren, sino que también pueden ser muy útiles para saber si ya se ha instalado alguno de ellos en nuestro PC.
Realizar una limpieza periódica en el ordenador
También va a ser importante mantener una buena limpieza de nuestro PC, tanto del hardware como del propio software y restos como cookies que se puedan haber quedado almacenados, corregir elementos del Registro defectuosos, etcétera. Muchas veces la lentitud no viene por un exceso de carga o por el hecho de que el PC esté realizando muchas acciones de forma simultánea, sino debido a que hay cadenas rotas por lo que en ocasiones puede estar realizando determinadas solicitudes que nunca finalizan y se repiten de forma constante.
Por esa razón, la limpieza deberá ser desde el punto de vista físico y desde el punto de vista de nuestro software, sistema operativo y programas instalados.
La limpieza física del PC
Aunque no lo parezca, mantener limpio nuestro PC y evitar la acumulación del polvo va a ser uno de los remedios más efectivos para recuperar la velocidad original de nuestro equipo.
Con el paso del tiempo, el polvo se va acumulando tanto en placa base como en el resto de componentes y sobre todo en los ventiladores, razón por la cual es esencial realizar una limpieza minuciosa que nos permita garantizar que los componentes funcionan sin interacciones y no se ven limitados por la suciedad.
Además de conseguir un funcionamiento más fluido, la limpieza también nos garantizará mantener una temperatura más adecuada del equipo, lo que significa que alargaremos la vida útil de los componentes.
Eso sí, estas limpieza hay que realizarlas de forma meticulosa pero siempre con mucho cuidado, evitando dañar cualquiera de los componentes o circuitos de los que se compone cualquiera de las placas y componentes informáticos que estén instalados.
La limpieza a nivel de software
También mantendremos una buena limpieza a nivel de sistema operativo y software, para lo cual será necesario ir borrando los archivos temporales tanto de Windows como de los navegadores que hayamos utilizado.
Las cookies acumuladas, registros con errores, elementos de privacidad, elementos temporales, la organización del disco, los archivos basura, accesos directos estropeados, problemas de vulnerabilidad, falta de optimización, etcétera, tan sólo nos van a llevar a ese peor funcionamiento del que nos queremos librar.
Que actuemos con responsabilidad siempre va a ser esencial, pero aun así veremos que con el paso del tiempo siempre se van acumulando todos estos elementos, es decir, vamos a tener que realizar limpiezas de cookies, reparación de elementos del Registro, deberemos desfragmentar el disco, reparar las vulnerabilidades que puedan tener lugar y por las que puedan acceder amenazas o permanecer errores del propio sistema operativo de los programas, etcétera.
Si realizamos estas acciones de forma manual, por supuesto vamos a conseguir la máxima efectividad, pero para la mayor parte de usuarios esto puede ser un problema importante, una pérdida de tiempo innecesaria y por supuesto también un calentamiento de cabeza que no nos lleva a ningún sitio, razón por la cual en el mercado encontramos una amplia variedad de programas que nos van ayudar en este sentido.
De muchos de ellos ya hemos hablado en la página, pero por supuesto vamos a destacar Advanced SystemCare, una herramienta que cuenta con todo lo necesario para realizar todas estas acciones haciendo clic en un único botón, además de que también incluye otras aplicaciones que nos permiten acelerar el equipo, acelerar Internet, mejorar la protección del equipo, actualizar drivers, hacer frente al spyware, desinstalar de forma completa los programas, evitando que queden restos, y un largo etcétera.
También hay otras herramientas interesantes como CCleaner o TuneUp que pueden trabajar conjuntamente, ofreciéndonos otras herramientas adicionales como incluso la posibilidad de activar o desactivar programas al inicio, es decir, elegir qué programas queremos que sigan funcionando en segundo plano incluso cuando no los estemos utilizando, o desconectarlos en el caso de que queramos reducir el consumo de recursos, de forma que tan sólo se activarán en el momento en que nosotros los ejecutemos.
En definitiva, si seguís estos consejos y realizáis un mantenimiento de forma regular, conseguiréis no sólo que vuestro ordenador vaya más rápido, sino que cada una de sus piezas y elementos disfrutarán de una vida útil más larga y por supuesto también más efectiva.