Proreta 5 se dedica a una de las tareas más desafiantes para la conducción automatizada: reconocer situaciones complejas de tráfico en los centros urbanos y cómo los algoritmos deducen las decisiones de conducción correctas a partir de los datos de los sensores.
En una intersección no controlada, por ejemplo, es un reto interpretar correctamente todos los objetos relevantes para el sentido de la marcha y su dirección de movimiento, intención y prioridad sin intervención humana.
La inteligencia artificial se vuelve crucial para este objetivo. Los métodos de IA deben probarse allí donde la aplicación de los enfoques convencionales resulte demasiado compleja o alcance sus límites.
La gran ventaja de la Inteligencia Artificial es que, tras una fase de entrenamiento, es capaz de sacar sus propias conclusiones correctas, incluso en situaciones desconocidas, basándose en lo que ha aprendido.
Proyecto de investigación de Continental sobre conducción autónoma: ¿de qué se trata hasta 2022?
El proyecto Proreta 5 (2019-2022), cuya duración prevista es de tres años y medio, investiga los algoritmos de cognición, predicción del comportamiento y toma de decisiones en un vehículo de demostración construido y equipado por Continental.
El objetivo, una vez finalizado el proyecto en septiembre de 2022, es evaluar el rendimiento de la nueva automatización basada en IA de nivel 4 de la Society of Automotive Engineer (SAE) utilizando una gama de escenarios tan amplia como sea posible en entornos urbanos para demostrar su potencial de uso futuro.
Los algoritmos basados en la IA deben ser capaces de identificar e interpretar correctamente estos complejos escenarios de tráfico para poder tomar después las decisiones correctas de conducción.
Esto incluirá la observación del conductor humano mientras reduce y evalúa la complejidad del entorno por sí mismo. Los algoritmos adaptativos del proyecto Proreta 5 se entrenarán según principios similares para conseguir un rendimiento de conducción comparable al de los humanos.
Para poder abarcar los distintos pasos de procesamiento a lo largo de la cadena real de la conducción automatizada con nuevos enfoques de solución de manera óptima y eficiente en el tiempo, el actual proyecto Proreta se ha ampliado a un nivel interuniversitario e internacional.
La larga y probada cooperación entre Continental y la Universidad Técnica de Darmstadt, que se ha centrado en subtareas individuales de asistencia al conductor y automatización, constituye la base para la participación de otras universidades en la actual cooperación de investigación.
Estas nuevas capacidades son necesarias para la conducción autónoma en entornos urbanos.
Por parte de la Universidad de Bremen, Proreta 5 aporta su experiencia en el campo del reconocimiento del entorno mediante la fusión de datos de sensores. Resumidos bajo el término técnico de cognición, son todos los procesos relacionados con la percepción y el reconocimiento.
La Universidad de Iași (Rumanía), por su parte, se centra en la predicción del comportamiento de otros usuarios de la carretera.
El equipo de la TU Darmstadt se centra en la ingeniería de sistemas y seguridad, la planificación de trayectorias y la ingeniería de control.
Mientras tanto, Proreta ha alcanzado el segundo hito: la primera campaña de medición para registrar los datos de entrenamiento en el vehículo prototipo con el software y el hardware de Continental está actualmente en marcha en Bremen.
El vehículo, que inicialmente se formó en Bremen, se entregará a la Universidad Técnica de Darmstadt para que realice nuevas pruebas a medida que avance el proyecto.
Por qué la conducción autónoma en el centro de las ciudades necesita de la cooperación
Karsten Michels, jefe de investigación e ingeniería avanzada de la división de Ingeniería y Tecnologías Holísticas de Continental, explica:
«Con la actual expansión e internacionalización, nos enfrentamos al mayor reto en el campo de la conducción automatizada: la conducción en la ciudad. La interfaz entre la automatización y los ocupantes del vehículo también desempeña hoy un papel fundamental. La información, la comunicación y la observación del conductor en el contexto de la automatización y la psicología están inextricablemente unidas», afirma Michels.