Para entender lo mejor posible todo lo referido a la tecnología militar y cómo ha cambiado la historia de la humanidad, debemos primero conocer algunas generalidades. Es una rama científica enfocada en el desarrollo de productos utilizados por tropas militares para el combate. Intenta hallar soluciones más eficaces en cada área inherente a ella.
De la mano con la tecnología militar, se hallan asociadas diversas ramas de la ingeniería. Incluso la medicina también ha jugado un papel importante a través del tiempo. Es así como, en la actualidad, es un área cuya investigación no se detiene. Y cada vez más busca abarcar otros ámbitos de la vida cotidiana. A continuación, veremos todo lo relacionado entorno a la tecnología militar, invitándote a profundizar en esta disciplina.
La evolución de la tecnología militar
Si bien la tecnología militar siempre ha existido, en el pasado ganaba menos connotación. El glorioso imperio romano se consideraba como uno de los más avanzados en el área. También suele recalcarse mucho la invención de los primeros armamentos de la humanidad. La maza, el puñal, las jabalinas, el arco y la flecha fueron algunos de los primeros avances armamentísticos en el área.
De igual manera, hay que mencionar todo lo que el uso de los metales aportó en la tecnología militar. Fue un elemento importante que cambió el curso de los futuros conflictos bélicos. Pero la invención de la pólvora por los chinos, que se remonta hacia el siglo XI, ayudaría a la creación de grandes armamentos que revolucionarían el combate de manera inimaginable. No fue sino hasta finales del siglo XIX que el verdadero avance militar empezó a notarse. Nuevos escenarios entraron en estos enfrentamientos bélicos.
Cuando se declara la Primera Guerra Mundial, mucha de esta tecnología desarrollada surtió el efecto esperado. Una vez finalizada, las distintas naciones del mundo entendieron lo importante que sería invertir adecuadamente en investigación militar.
La explosión de la Segunda Guerra Mundial destacó el gran salto tecnológico militar fue más que evidente a nivel mundial. Tanto el viejo como el nuevo continente realizaron investigaciones importantes en el área para mejorar aquello que ya existía. Y se enfocaron en inventar nuevas herramientas de combate.
La invención de la bomba atómica fue un hecho importante que cambió el futuro de las siguientes guerras. Marcó un precedente de gran importancia no solo por la naturaleza de la destrucción que podía causar. Su relativamente fácil accesibilidad atrajo la atención en su investigación. Su rápido avance no generó mayores conflictos entre naciones, pero siempre ha existido una tensión latente.
Investigaciones de tecnología militar con mayor auge
Tanto en telecomunicaciones como en el área espacial, armamentística y computacional, lograron realizarse avances significativos. Si bien nos pudieran parecer ajenos al área militar, la verdad es que cualquier herramienta es válida con el fin de innovar.
Es así como, en la actualidad, la tecnología militar busca realizar avances importantes. Teniendo en cuenta la relación coste-eficacia, lo anteriormente dicho ha ayudado a realizar investigaciones en el área del transporte, información, nuevos materiales, microelectrónica y mucho más.
Muchos de los productos desarrollados para la aplicación militar son adaptados posteriormente para al ámbito civil. Muy poco suele suceder al contrario. Lo que sí es cierto, es que los productos de origen militar se han hecho famosos en la sociedad, todo gracias a su alta eficacia y competitividad. Su relación calidad-precio les ha ayudado a ser parte del mercado civil, satisfaciendo ciertas necesidades en la población.
Situación actual de la tecnología militar
La tecnología militar se halla estrechamente ligada al área electrónica y digital. Hoy en día, los escenarios de lucha han cambiado considerablemente. Las guerras cibernéticas ya no son tema de ciencia ficción.
Por su parte, la electrónica ha revolucionado el ámbito militar de una manera inimaginable. Asimismo, la investigación en el área de la propulsión, la aerodinámica, la investigación de materiales y explosivos, han sido parte del reciente avance tecnológico.
Toda esta moderna tecnología ha ayudado al desarrollo de todo tipo de implementos. Mejores armas, aviones, misiles de largo alcance, vehículos de combate y sistemas navales. Tampoco se ha escatimado en el desarrollo de radares, redes comunicacionales, equipos de guerra electrónica y sistemas de navegación e información.
Los sistemas electrónicos ya mencionados han venido marcando una pauta importante en todas las áreas de investigación militares. De esta forma, se ha logrado modificar el tamaño, el consumo energético y la eficacia de muchos artefactos ya existentes. Lo que antes necesitaba ser transportado en un pequeño camión, hoy en día se puede llevar fácilmente en una mochila.
En el mismo ámbito de la electrónica, las longitudes de onda son otro aspecto importante que se ha logrado mejorar. Ha ayudado a desarrollar nuevas tecnologías tanto a altas como a bajas frecuencias. Su fin se ha enfocado en conseguir comunicaciones fiables en cualquier terreno.
Las telecomunicaciones: Factor clave dentro del ámbito militar
La utilización de fibra óptica, comúnmente utilizada en el ámbito civil, también tiene sus implicaciones en el ámbito militar. Todo lo referido a la transmisión de datos ha mejorado considerablemente gracias a esta tecnología.
Basado en esto, la fibra óptica es una herramienta útil para guiar torpedos y misiles de largo alcance. Asimismo, es útil en la detección de submarinos enemigos y en el desarrollo de giróscopos ópticos mejorados.
Los sistemas de explotación y de recogida de información en el campo de batalla son otros aspectos que la electrónica militar ha venido desarrollando. De esta manera, se podrá disponer de información en tiempo real sobre las órdenes, planes, operaciones, el terreno, cobertura de defensa aérea y mucho más.
El desarrollo de microordenadores también representa gran parte de los esfuerzos que la tecnología militar ejerce. Es importante para el diseño y fabricación de nuevos armamentos. Los sistemas de guerra electrónica son un vivo ejemplo de esto. Se pueden almacenar características de radares enemigos, pudiendo reconocerlos y sabotearlos.
El futuro de la tecnología militar
Lo que antes parecía ciencia ficción, cada vez lo podemos vislumbrar más cerca. Es por ello que las naciones del mundo no han escatimado en gastos a la hora de invertir. La tecnología de pulsos electromagnéticos destaca entre muchos. Ya se ha hablado al respecto desde hace un buen tiempo y se ha especulado mucho. La posibilidad de generar grandes daños a equipos electrónicos enemigos será una ventaja considerable.
Las armas de energía dirigida serán otro tema interesante a desarrollar. La investigación de armas láser lleva décadas de estudio y esfuerzos enfocados en conseguir resultados concretos. Su uso ya es un hecho en la actualidad. Pero por ahora solo está limitado a la designación de blancos y en los telémetros. El daño que estos producen aún no es tan destructivo. Sin embargo, es un arma que fácilmente puede cegar a los enemigos que no se hallen protegidos adecuadamente.
Las microondas de gran potencia, al igual que los pulsos electromagnéticos, podrían terminar siendo otra gran tecnología próxima a desarrollar. El saboteo de circuitos eléctricos sería su objetivo principal. Con la particularidad de que pudieran terminar siendo incluso más efectivas que los pulsos.
Desarrollo de tecnología de geolocalización
Por otra parte, los sistemas de reconocimiento e inteligencia terrestre, aérea y espacial, generan gran empatía en el ámbito militar. La implementación de nuevos radares de apertura sintética y medios de alerta y control son los que facilitarán esta tarea. Se plantea también la utilización de sensores radar, sísmicos, magnéticos, infrarrojos y foto-ópticos. Ayudarán a obtener toda la información necesaria en la batalla.
Se sabe también que se piensa desarrollar un sistema de transmisión de imágenes integrado en los proyectiles de artillería. Un proyectil de 155 mm podrá equiparse con este sistema para así poder transmitir imágenes a un ordenador a distancia. Con lo cual, se podrá obtener información sobre el terreno.
En el terreno aéreo, se están ideando nuevas tecnologías que permitan transmitir fotografías de objetivos a bases aliadas para así liquidarlos en tiempo real. También se planea desarrollar un sistema de radares y sensores ópticos que permitan obtener información detallada sobre una región determinada y con la mayor seguridad posible.
Avances en el área de vigilancia
De igual manera, la tecnología militar actual se ha planteado a futuro enfocar grandiosos esfuerzos en el reconocimiento del campo de batalla. Se buscará la manera, bien sea a través de radares o sensores, de examinar la zona circundante de 400 km a la redonda.
La vigilancia y reconocimiento serán otros aspectos importantes en el futuro de la tecnología militar. La utilización de drones y otros vehículos pilotados de manera remota seguirán es constante investigación y desarrollo para el futuro. En conjunto con esto, también se plantean la utilización de satélites que mejoren estas tareas de manera significativa.
Todo lo mencionado hasta el momento solo nos lleva a una conclusión lógica: la complejidad de las futuras guerras aumentará. En este sentido, los nuevos armamentos, nuevas tecnologías, nuevos materiales y nuevas tácticas, marcarán el futuro de la humanidad. Si bien los anteriores conflictos bélicos registrados se enfocaban más en el coraje, de ahora en adelante la inteligencia será lo que más predomine.
Para el futuro, se espera que las enormes capacidades a nivel digital, comunicacional y estratégico, definan todo lo que acontezca en el campo de batalla. Todo indica que la electrónica jugará un papel fundamental y que la intervención humana tendrá menos relevancia con respecto a tiempos pasados.
La economía y la tecnología militar
El desarrollo de este tipo de tecnología requiere una disposición de tiempo completa. Sin embargo, requiere una sustanciosa inversión de capital para lograr el fin establecido. El dinero se considera esencial para sostener la industria militar. Aunque se establezca unas fuerzas armadas numerosas, un poder económico debilitado no permite crear un sistema de defensa seguro para la nación.
Mantenerse a la vanguardia con los avances tecnológicos, y un pie adelante en las investigaciones, puede asegurar la victoria militar. Si bien los conflictos bélicos han sido sustituidos por la diplomacia, el uso de armas y la tecnología militar permite resguardar la integridad de una nación.
Sin embargo, invertir en este campo implica tener conocimiento de las ventajas y limitaciones de su empleo. Durante el desarrollo de cualquier tecnología de este tipo, será necesario realizar pruebas para determinar su eficacia, seguridad, fiabilidad, así como la utilidad y provecho que ofrece. Por lo que es necesario tener claro que los resultados no serán de inmediato. Y los fondos destinados a este fin no aseguran que al final el equipo desarrollado sea aprobado para su uso.
Es de esta manera que la estrategia clara es implementar métodos de desarrollo de bajo coste. Pero que a la vez aseguren que la tecnología obtenida cumpla los estándares establecidos durante el proceso de investigación.
El factor humano dentro de la tecnología militar
Desde cualquier punto de vista, debe existir una relación estable entre el hombre y la tecnología. El factor humano suele condicionar el alcance militar a nivel tecnológico. En primer lugar, se debe estudiar las estrategias de combate para determinar qué tipo de equipamiento puede ser utilizado en situaciones específicas. Siendo la movilidad es uno de los puntos claves para trabajar en el desarrollo de tecnología militar.
Aun así, la manera en que evoluciona el diseño de armas y otros equipamientos de esta área, es que irán cambiando las funciones que cumplen los militares. Esta tecnología busca tener un impacto mayor. Dando a lugar enfrentamientos a distancia. Evitando sacrificar vidas a gran escala.
Su diseño también debe generar una respuesta en el enemigo. Esto puede suponer un flaqueo en las defensas. Se trata de combinar la apariencia con el funcionamiento de la tecnología. Aunque no siempre se cumple esta relación. Las granadas, a simple vista pueden considerarse inofensivas. Pero al ver su impacto y alcance es lo que puede generar ansiedad en muchos. Por lo que su presencia dentro del campo de batalla puede combinarse con otras estrategias para generar mejores resultados.
La historia humana está llena de conflictos y catástrofes que han marcado cambios importantes en la sociedad. Gracias a ellos, las principales naciones del mundo han invertido grandes cantidades de esfuerzo, dinero e inteligencia en la tecnología militar. En favor de asegurar su supervivencia ante cualquier eventualidad, cada vez son más los avances que se logran alcanzar en busca de ese objetivo. De tal forma, podemos estar seguros de que nos aguarda un futuro impresionante en materia militar.