Los teléfonos móviles nos acompañan a lo largo de todo el día, tanto para darles un uso personal como para el trabajo, los estudios, el ocio y un largo etcétera. Sin embargo, son dispositivos relativamente frágiles, siendo la pantalla uno de sus puntos más débiles. Por esa razón vamos a explicaros algunos trucos acerca de cómo mantener la pantalla de tu móvil en perfectas condiciones, y todo ello con tan solo tener en cuenta unos cuidados muy básicos y mantenimiento sencillo.
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La pantalla de tu móvil, una de las piezas más delicadas
Los teléfonos inteligentes o smartphones llegaron al mercado ofreciendo un cambio muy sustancial en comparación con los anteriores dispositivos telefónicos, y es que integraban una mayor capacidad a través de la incorporación de un microprocesador que permitiría utilizar multitud de aplicaciones y funciones que de otra forma era imposible.
Sin embargo, también venían acompañados de algunos problemas como el hecho de contar con unas dimensiones mayores puesto que es imprescindible una pantalla más grande para poder sacarle partido, consumían más energía y, sobre todo, destacaba que eran dispositivos mucho más delicados.
Poco a poco todo esto ha ido mejorando en mayor o menor grado, en especial la resistencia, ya que hubo modelos que inclusive se llegaban a doblar si los guardábamos en el pantalón, y con el tiempo, algunos acababan partiéndose.
Los dispositivos fabricados a día de hoy ofrecen una buena resistencia, pero siguen manteniendo su punto débil en la pantalla de tu móvil, la cual es la que está más expuesta de forma que se favorece su deterioro acelerado ya sea por roces o pequeños golpes.
Los cristales actuales son muy resistentes a los arañazos, pero siguen estando expuestos a los golpes, y es que con una simple caída al suelo, nos podemos encontrar con que ya no podemos utilizar nuestro teléfono móvil hasta que arreglemos su pantalla, y en ocasiones, este coste puede ser excesivamente elevado para el valor del móvil, lo que significa que tendremos que desembolsar el dinero para comprar un nuevo terminal.
Trucos para proteger la pantalla de tu móvil y mantenerla en perfectas condiciones
Si quieres mantener la pantalla de tu móvil en perfectas condiciones y evitar su deterioro y accidentes, vamos a contarte algunos de los trucos imprescindibles con los que lograrás evitar problemas de visualización al mantener una pantalla completamente libre de rayajos y roturas.
La limpieza de la pantalla de tu móvil
Comentábamos antes que las pantallas actuales cuentan con una resistencia bastante elevada a los arañazos, gracias a lo cual, seguramente habréis tenido algún que otro percance y os habrá alegrado ver que no ha llegado a afectar a su superficie.
El problema es que si no llevamos cuidado, al final acabamos teniendo pequeños arañazos que, en su conjunto, acabarán haciendo que la pantalla se vea peor, lo cual habrá que sumar que poco a poco se irá debilitando.
Mantener bien limpia la pantalla del móvil es una buena forma de evitar que se acumule en partículas que puedan causar arañazos.
Recuerda que cuando vayas a limpiarla, si no quieres que cualquiera de estas partículas pueda deteriorar la superficie, deberás utilizar un paño suave que pasarás en una única dirección para deshacerte de estos restos.
Una vez que lo hayas hecho, podrás utilizar otro paño suave (o el anterior siempre y cuando lo hayas sacudido bien para que no queden restos) para sacar brillo a la pantalla y a la carcasa.
En la medida de lo posible no utilices productos químicos, y echa un vistazo a las recomendaciones del fabricante para evitar el deterioro de la capa protectora de la pantalla, y es que, recuerda, conforme se va desgastando esta capa, tu pantalla cada vez que dará más expuesta a los arañazos.
Utiliza siempre una funda protectora
La funda protectora y los estuches para teléfonos móviles son una de las mejores soluciones tanto para los arañazos como para las roturas.
Lo ideal son fundas o estuches que estén bien acolchados y/o sean rígidos en el exterior, ya que son las opciones mejor desarrolladas para evitar la rotura de la pantalla en caso de impacto.
En el mercado puedes encontrar opciones muy interesantes, bonitas e incluso con tamaños reducidos, y recuerda que siempre es mejor la opción que cubre el terminal por completo que aquellos modelos que tan sólo protegen una o dos caras.
Los protectores de pantalla, útiles y económicos
Otro recurso muy recomendable son los protectores de pantalla.
Se trata de unas finas láminas completamente transparentes que se adhieren fácilmente a la pantalla por lo que crean una capa extra de protección muy fiable.
Estos protectores evitan los arañazos, además de que se pueden cambiar cuando su superficie se haya deteriorado, manteniendo la pantalla del móvil perfecta.
También protegen frente a pequeños golpes, aportando una mayor rigidez que evita que pueda parecer cualquier pequeña raja.
Lo más importante si decides por un protector de pantalla es que optes por uno que se adapte perfectamente a las dimensiones de tu pantalla.
Cuida dónde colocas tu teléfono y hazlo siempre boca arriba
A lo largo del día realizamos muchas tareas y nos movemos por infinidad de sitios, lo que hace que debemos el teléfono en la mano lo pongamos encima de una mesa, después lo metamos en el bolsillo, posteriormente en el bolso o zurrón y así un largo etcétera.
Si no nos fijamos bien, podemos acabar metiendo el móvil en los pantalones junto a las llaves, o en un bolsillo del bolso donde tenemos elementos que puedan ser cortantes como es el caso de las monedas, o por supuesto, es muy habitual que lo coloquemos boca abajo sobre la mesa cuando estamos de charla con unos amigos, con lo que exponemos la pantalla a zonas rugosas y peligrosas.
Los bolsillos, uno de los mayores enemigos de la pantalla de tu móvil
El bolsillo es el lugar donde guardamos las cosas para las cuales necesitamos tener acceso a lo largo del día, y entre ellas, además del móvil, también se incluyen las monedas, mecheros y llaves entre otros.
Esto va a hacer que cuando saquemos, metamos o incluso cuando estemos andando y se mueva el contenido del bolsillo, nuestra pantalla se pueda estar rayando.
Evita guardar en el mismo bolsillo el teléfono y el resto de artículos, y recuerda que si los bolsillos son ajustados y se encuentran en la parte delantera o trasera, existe la posibilidad de que doblemos el dispositivo al sentarnos.
Mucho cuidado con los cambios bruscos de temperatura y con las temperaturas extremas
Los teléfonos inteligentes han evolucionado mucho hasta el punto que algunos modelos cuentan con potencias muy elevadas, pero los sistemas de refrigeración todavía no están suficientemente desarrollados debido a las escasas dimensiones de estos aparatos.
Esto hace que cuando los utilizamos de forma continuada, comiencen a calentarse más de la cuenta, lo cual hará que sus componentes internos se deterioren con rapidez.
Esto también ocurre si dejamos el teléfono móvil al sol o incluso lo utilizamos en zonas muy húmedas, pero sobre todo sufre cuando se producen cambios bruscos de temperatura, es decir, el terminal pasa de estar muy frío o muy caliente a muy caliente o muy frío, ya que es cuando tanto componentes internos como pantalla van a sufrir más de lo debido, cortando su vida útil y reduciendo el rendimiento.
El seguro para móviles, una protección adicional para cuando todo lo anterior falla
También existe otra alternativa que es la de contratar un seguro para teléfono móvil.
De esta manera, con una pequeña cantidad tendrás la tranquilidad de saber que si tu pantalla se deteriora o se rompe, podrás cambiarla por otra sin tener que realizar el desembolso.
No obstante, antes de contratar el seguro para smartphone recuerda analizar bien todos los detalles, ya que es posible que no cubra determinadas cosas y te encuentres con que has pagado el seguro y después tienes que pagar también el arreglo aparte.
Estudiante de Ingeniería Industrial y amante de la escritura y la tecnología, desde hace varios años participo en diversas páginas con el objetivo de mantenerme siempre informado de las últimas tendencias y aportar mi granito de arena en esta inmensa Red de difusión que conocemos como Internet.
